Hoy en día,  es imprescindible contar con un nivel alto de inglés, no sólo como elemento diferenciador entre los demás candidatos en una situación de búsqueda de empleo, sino para aprender y ampliar nuestros conocimientos tecnológicos obteniendo la información de los distintos medios y plataformas digitales en este idioma. Por consiguiente, es necesario contar con una acreditación que muestre exactamente nuestras competencias lingüísticas. Por estos motivos, me he decido a ampliar mi formación, obteniendo así la certificación del B1.

Actualmente el nivel B1 de inglés es la certificación mínima que garantiza el suficiente conocimiento para realizar trabajos en los que este idioma sea utilizado en documentación o en conversación con otras personas.

Actualmente existen distintas titulaciones como Cambridge, Trinity, TOEFL, IELTS. Vamos a ver solo las dos primeras, ya que TOEFL, IELTS tienen una validez de solo dos años, por lo que no son muy recomendables.

Cambridge y Trinity certifican el nivel de inglés requerido en el "Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas" (MCERL). Según este marco, un alumno con B1 debería ser capaz de:
  1. Comprender las ideas principales de un discurso cuando este es de uso cotidiano y relacionado con temas como el trabajo, colegio u ocio.
  2. Entender aquellos textos redactados con vocabulario y phrasal verbs de uso habitual.
  3. Desenvolverse sin problemas en cualquier situación que se presente en un viaje a un país de lengua inglesa.
  4. Escribir textos de forma sencilla y con buena estructuración siempre y cuando traten de temas conocidos o de interés para el estudiante.
Las principales diferencias entre las dos certificaciones son:
  • Cambridge: en el caso del examen de Cambridge, su composición es más del tipo académica, ya que presenta tanto gramática como vocabulario en su apartado Use of English. Este examen consta de cuatro pruebas: Speaking, Listening, Writing y Reading teniendo que tener más de un 60% de puntuación global para obtener el título. Este examen es conjunto y no se guarda la nota en caso de suspender alguna prueba. Como punto a favor, existen múltiples convocatorias durante todo el año.
  • Trinity: Por otro lado, el examen de Trinity tiene un enfoque más laboral aplicado a la empresa, centrándose más en la expresión y en la comunicación y constando de solo dos partes: Speaking-Listening y Writing-Reading. La ventaja de este examen es que te puedes presentar a cada prueba por separado, guardándose la nota para siguientes convocatorias. Los Exámenes Trinity del London Trinity College otorgan títulos oficiales de inglés con reconocimiento mundial. Fundado en 1877, Trinity College London se sitúa como el primer comité examinador del mundo en referencia a exámenes orales en nuestro país. Aunque, según el certificado, también tiene una parte escrita, el Trinity es ideal para testar el nivel oral del idioma, lo que resulta ideal si se desea conseguir un trabajo de cara al público o en el que la conversación, en general, es fundamental. Con respecto a las convocatorias Trinity cuenta con un punto en su contra, normalmente solo se hacen 2 convocatorias, en febrero y en junio. Por lo que si no aprueba en junio, deberías esperarte a la siguiente convocatoria de febrero del año siguiente.

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